El desarrollo profesional de los trabajadores/as del sector de la Educación de Adultos es esencial para mejorar la calidad y la eficacia de la formación de adultos.
En el sector de la Formación de personas adultas, un alto número de profesionales, incluidos formadores/as y profesores/as, provienen de otros sectores y aunque tienen experiencia en al ámbito de trabajo, no disponen de las competencias pedagógicas y didácticas necesarias en la formación de personas adultas.
En este sentido, la Comisión Europea desarrolló en 2010 un marco competencias para los profesionales de la formación de personas adultas.
El proyecto DEMAL se construye bajo este marco y se centra en el desarrollo de dos de esas competencias:
- Diseño de procesos de aprendizaje de personas adultas, y
- Seguimiento y evaluación de los procesos de formación de personas adultas.